
En cada cocina del Caribe o de Iberoamérica, así como en África, el plátano verde macho es un alimento cotidiano. Sin embargo, detrás de su aparente sencillez se esconde un poder nutricional excepcional: es fuente de salud digestiva, bienestar mental y equilibrio intestinal.
Esta joya de la tradición alimentaria merece hoy un lugar destacado en la conversación científica sobre microbiota intestinal (llamada anteriormente flora intestinal) y salud preventiva.
Muy recientemente, se celebró en República Dominicana el Congreso Agroalimentaria 2025, el más brillante de toda la región, donde la Academia Dominicana de Gastronomía (ADG), presidida por Luis Ros, tuvo un papel protagonista en el panel dedicado al Plátano Verde como alimento sostenible, con la presencia de su director ejecutivo, Don Gabriel Atiles Bidó, historiador y antropólogo, y el Dr. Alejandro Bonetti Munnigh, uno de sus distinguidos académicos.

Producción. Consumo de plátano verde
El plátano verde macho, originario del sudeste asiático, ha desempeñado un papel primordial en la historia de la alimentación humana. Desde su domesticación ancestral hasta su consolidación en el Caribe y África, este fruto ha evolucionado desde el cultivo básico hasta ser objeto de un enorme interés científico que hoy centra nuestra intervención.
Fuentes de la FAO aseguran que 100 millones de habitantes/día ingieren plátano verde macho, solo superado por el arroz, con 3.500 millones de habitantes/día, el trigo, el maíz, las patatas y las legumbres.
La producción y consumo de plátano verde macho en la República Dominicana es un tema de gran relevancia económica, cultural y nutricional. Este alimento es pilar de la dieta dominicana, especialmente en su forma verde (no madura), y tiene usos tanto tradicionales como emergentes en salud digestiva y nutrición funcional.
Algunos datos destacados (según últimos registros disponibles del Ministerio de Agricultura y la FAO):
Superficie cultivada » 150.000 hectáreas.
Producción anual: más de 2 millones de toneladas métricas.
La República Dominicana es uno de los principales productores de plátano del Caribe y Centroamérica.
La mayor parte del plátano producido es para consumo interno, con una fracción destinada a la exportación (especialmente maduro o procesado).
En la actualidad, su valor nutricional y su aporte a la salud intestinal lo posicionan ya no solo como un clásico alimento de subsistencia, sino como un alimento funcional clave dentro de la dieta de los países tropicales, africanos y de la Dieta Mediterránea adaptada.
Breve historia
Una mirada histórica breve nos centra en el interesante recorrido a lo largo de los años:
Origen y domesticación: Se estima que las primeras especies de Musa fueron domesticadas hace más de 7.000 años en el sudeste asiático y Papúa Nueva Guinea.
Expansión por África: Llevado a África por rutas comerciales antiguas. Integrado en la dieta subsahariana, especialmente en Uganda, Congo y Camerún.
Introducción en América: Siglo XV-XVI: Navegantes portugueses y españoles lo introducen en el Caribe y América del Sur (Hispaniola, Brasil).
Consolidación en la cultura caribeña: Siglo XVII-XIX: Base alimentaria en la dieta afrodescendiente. Presente en la gastronomía tradicional dominicana, cubana y puertorriqueña.
Siglo XX: Nutrición y soberanía alimentaria: Promovido como cultivo clave en seguridad alimentaria en el Caribe y Centroamérica.
Siglo XXI: Redescubrimiento científico.
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Propiedades:
Reconocido por su almidón resistente, con gran utilidad en dietas digestivas y en el eje intestino-cerebro.
Almidón resistente, un tipo de fibra que no se digiere en el intestino delgado.
Potasio, esencial para el buen funcionamiento muscular y cardíaco.
Magnesio, vitamina B6 y otros antioxidantes naturales.
Además, es bajo en grasa y colesterol y tiene un índice glucémico más bajo que otros carbohidratos refinados.

El plátano verde macho: más que energía
El plátano verde macho contiene un tipo especial de carbohidrato conocido como almidón resistente tipo 2. A diferencia de otros almidones, este no se digiere en el estómago ni en el intestino delgado, sino que llega intacto al colon, donde sirve de alimento a las bacterias beneficiosas que habitan nuestro intestino.
Microbiota intestinal: nuestro aliado invisible
Una microbiota equilibrada:
Fortalece el sistema inmune.
Regula la inflamación.
Favorece la digestión y la absorción de nutrientes clave para mantener la salud del colon y prevenir enfermedades crónicas.
El segundo cerebro: intestino y mente
La ciencia ha confirmado que el intestino es un auténtico “segundo cerebro”, con millones de neuronas que se comunican directamente con nuestro sistema nervioso central a través del eje intestino-cerebro. Un intestino sano no solo mejora la digestión, sino también el estado de ánimo, la concentración y el descanso.
Una solución accesible y culturalmente propia
Lo más fascinante es que este “superalimento” no es un producto de laboratorio ni una moda importada: es parte de nuestra cultura gastronómica, accesible y sostenible. Promover su consumo responsable es apostar por la soberanía alimentaria y la medicina preventiva con rostro humano.
Conclusiones
El plátano verde macho en países como República Dominicana, en Iberoamérica y en África, es más que un alimento básico tradicional de subsistencia. En la actualidad es un alimento funcional, convirtiéndose en una herramienta para cuidar nuestra salud digestiva, inmunológica y mental. En su fase de plátano maduro, no tiene las mismas propiedades, ya que se transforma en hidratos de carbono (azúcares) en el intestino delgado.
Hoy en día es un símbolo de identidad nacional, una fuente económica vital y un recurso con potencial creciente en salud pública y nutrición funcional.
Su inclusión en la dieta mediterránea es una oportunidad para reconectar con lo que nuestras abuelas sabían y la ciencia hoy confirma: comer bien es pensar bien.
Autores:
- Prof. Alejandro Bonetti Munnigh. Director del Aula Dieta Mediterránea y Vida Saludable de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Andalucía Oriental, Ceuta y Melilla. Director Adjunto del Seminario Permanente de la Dieta Mediterránea de la Universidad de Almería (UAL). Académico de la Academia Dominicana de Gastronomía (ADG), Académico de la Academia de Medicina y de la Academia de Ciencias de la República Dominicana.
- D. Luis Ros. Presidente de la Academia Dominicana de Gastronomía, Conseiller Gastronomique del capítulo dominicano de la Chaîne des Rôtisseurs, y miembro del consejo directivo de la Asociación Dominicana de Restaurantes (ADERES).
- D. Rafael Ansón. Presidente de la Academia Iberoamericana de Gastronomía, Presidente de Honor de la Academia Internacional, Copresidente de la Comunidad Europea de la Nueva Gastronomía y Presidente de Honor de la Real Academia de Gastronomía de España. Fundador y Secretario General de la Fundación Española de la Nutrición. Académico de Honor de la Academia Hispanoamericana de Doctores.