En el Nyotaimori comida y arte se mezclan en función del erotismo, en un sistema del que se hace dificil deslindar belleza estética de placer sensorial.
Del legendario Japón nos llega un acto muy relacionado con la instalación o el performance de las artes plásticas —y hasta con el teatro— donde se funden ambos sentidos del término "comer", una tendencia, que sin dudas, habla muy bien de la condición artística de lo culianrio.









