Papas fritas

En el mundo de la comida rápida y la cocina tradicional, la combinación de hamburguesas con papas fritas ha logrado mantenerse como un dúo imbatible que conquista paladares en todos los rincones del mundo. Esta asociación de sabores y texturas ha trascendido culturas, generaciones y tendencias gastronómicas, convirtiéndose en un símbolo de comodidad, sabor y satisfacción. La hamburguesa: un ícono de sabor y versatilidad

Lo de VIPS no es normal. Cuando se pensaba que la marca había dado un golpe en la mesa con su nueva carta de deliciosos platos atípicos, se produce este giro de guion: ‘patatas con todo’. Sí, la nueva campaña de VIPS, marca de restauración operada por Alsea, repartirá 300.000 raciones de patatas fritas gratis con todos sus platos. Para que nadie le quite una patata a nadie, VIPS lanza esta promoción que estará activa del 2 al 6 de octubre en todos sus restaurantes. 

Como las papas fritas nos gustan a todos, y no son muy sanas en cuanto a grasas, aquí te dejamos una serie de consejos para disminuir la absorción de aceite una vez que se vayan a freír. Las recomendaciones vienen de la mano de la Licenciada Patricia M. Chávez del departamento de Nutrición de DIM CENTROS DE SALUD.

Monti es una empresa familiar que se caracteriza por su firme compromiso con la calidad, el medio ambiente y el exquisito sabor de sus productos. Su enfoque especial en proporcionar opciones ecológicas y saludables a sus clientes ha permitido que la compañía obtenga un notable reconocimiento en el mercado global.

Las papas fritas, como snack es uno de los más consumido del mundo. La papa, como alimento, hay datos que estiman su producción mundial de más de 370 millones de toneladas, según la FAO. 

El éxito de las mejores papas fritas está, según dicen por ahí, en el amor que le pongas. Para celebrar este día, compartimos una receta sencilla de esta elaboración: Ingredientes: Patatas 3  Aceite de girasol 1 l Sal al gusto Elaboración:

Es normal que te pregunten: "¿Te apetecen unas papas fritas con eso?" cuando pides algo en un restaurante. A lo que muchos de nosotros decimos que sí sin pensar, porque, después de todo, sólo son unas papas fritas, ¿no? Pero ¿qué harías si esa ración de este alimento costara 200 dólares?