Su restaurante homónimo, de alta cocina regional y de autor, despliega una estrategia renovadora de combinación de ingredientes y de técnicas de cocción, afianzada en raíces ancestrales, que dan como resultado una oferta culinaria actual sustentada en la creatividad y la libertad de ideas.
En el centro de esta novedosa propuesta a favor de una cocina chiapaneca contemporánea y de un esquema integral de la experiencia turística se encuentra la Chef Marta Zepeda, considerada como uno de los jóvenes talentos de la gastronomía mexicana.
A su entender, la clave es lograr un producto diferente en calidad pero fiel al sabor tradicional de la comida: “Las propuestas de autor tienen un carácter dado por las materias propias de la región donde radica el cocinero, así como por la técnica de cocción que se utiliza.
Pero son también la expresión del gusto personal de un chef, que rompe con los esquemas y da una nueva manifestación a los sabores, con un toque personal y distintivo; es decir, firma sus platillos con un estilo propio, modificando los sabores que podrían esperarse”.
Platillos como el Rollo de frijol con queso de Chiapas, el Tamal de toro pinto, los Palmitos de Teopisca, el Escabeche de nopal, la Carne Tártara Simojovel y las Gorditas Ixim forman parte del mosaico de delicias que integran la incomparable carta de “Tierra y Cielo”.
La todavía más prometedora carrera de Marta Zepeda ya incluye distintos reconocimientos nacionales tanto a su hotel (con apenas cuatro años desde su fundación), como a su restaurante, y a su trayectoria como chef y empresaria.
Entre ellos destaca el Premio al Mérito Empresarial Restaurantero “José Peza Fragoso” de cocina regional, otorgado por la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC) de México.