Las bebidas detox llevan años ganando popularidad entre quienes buscan un “reinicio” físico. Con la promesa de acelerar el adelgazamiento o simplemente mejorar la salud, se les adjudica una gran capacidad para eliminar toxinas, aportar energía, mejorar la digestión, etc. Y justo cuando inicia el verano, gana aún más terreno cual solución mágica para lucir bikinis perfectos o, bien por su capacidad para ofrecer una alimentación ligera y fresca, sin olvidar el aporte nutritivo, gracias a su alta composición de frutas y verduras. Pero, ¿qué tan efectivos son realmente? ¿Puede esconder peligros?
Beneficios de las bebidas detox
En realidad, el argumento de la ingesta de frutas y verduras tiene un beneficio real sobre todo en personas con dietas desequilibradas. En ese sentido, los jugos detox pueden funcionar muy bien al incluir ingredientes como el jengibre, la menta, el pepino o la manzana verde, los cuales aportan nutrientes, antioxidantes y enzimas que ayudan al sistema digestivo.
Otro de sus beneficios indirectos es que eliminan temporalmente alimentos procesados, azúcares añadidos o grasas saturadas de la dieta. De manera que a menudo se asume como una pausa buena para la reflexión sobre los hábitos alimenticios y sí, también pueden ayudar a perder peso… pero no siempre de la forma adecuada.
Efectos negativos de las bebidas detox
Los jugos detox no son inocuos. La parte que pocos cuentan es que su efecto diurético puede provocar deshidratación, pérdida de masa muscular y, en muchos casos, el temido efecto rebote: el peso que se pierde en unos días se recupera igual de rápido una vez se retoma una dieta normal.
Por otro lado, existe un riesgo comprobado científicamente relacionado con la formación de cálculos renales por el consumo en exceso de ciertos vegetales con alta presencia de oxalatos. A todo ello se suma que a largo plazo las limpiezas prolongadas pueden llevar a estados de irritabilidad, fatiga, dolores de cabeza e incluso desórdenes digestivos como diarrea o estreñimiento.
¿Debemos consumir bebidas detox?
Tomar una bebida detox de vez en cuando no es perjudicial. De hecho, puede resultar una manera agradable y fresca de empezar el día. Pero convertirlo en una dieta o esperar grandes transformaciones es otra historia. Para ello, están el hígado, riñones, pulmones y piel, órganos depuradores por excelencia del organismo humano, a los que los jugos pueden acompañar, pero nunca reemplazar.
