Este lunes 16 de octubre se celebra el Día Mundial del Pan, un alimento tradicional que no puede faltar en la dieta de millones de personas. A pesar de ser un básico en la mesa, su elaboración es todo un arte que necesita tiempo y cariño por parte del maestro panadero.
El pan más consumido de Francia ha recibido un reconocimiento que la reafirma como uno de los hitos gastronómicos de esa nación. La fabricación de la baguette ha sido nombrada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha expresado este viernes su apoyo al deseo manifestado por el jefe de la patronal de los panaderos franceses de ver la "baguette", esa barra de pan estrecha, alargada y crujiente convertida en un símbolo de la tradición y la idiosincrasia francesas, incluida en la lista de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad de la Unesco.