
Cuando Starbucks lanzó en 2004 el Pumpkin Spice Latte, no imaginó que 20 años después sería el símbolo líquido de otoño que hoy enloquece a los amantes del café. La receta devino de la idea de crear una bebida para cada estación. Y, claro, ¿qué puede ser más otoñal que la calabaza?
De hecho, hay quienes viven la cuenta regresiva de octubre con el deseo de regresarle al paladar esta fusión de sabores, entre el café, la leche, la calabaza y especias variadas. Su éxito ha inspirado toda una familia de bebidas: Pumpkin Cream Cold Brew, Pumpkin Spice Frappuccino o Salted Caramel Oat Milk Iced Shaken Espresso, entre otras.
El resultado es un café especiado, cremoso y fragante, lo mismo frío o caliente, una experiencia sensorial que, más que una receta, se ha convertido en un ritual de temporada. Pero aunque la elaboración tiene su origen en Starbucks, lo cierto es que no hay que sentarse en sus locales para degustar el brebaje.
¿Puedo preparar el Pumpkin Spice Latte al estilo Starbucks en casa?
La respuesta es un sí rotundo. Hacerlo es tan sencillo como reunir los siguientes ingredientes:
- 30 ml de puré de calabaza natural o comprado
- 12 g de azúcar o edulcorante
- ½ cucharadita de canela molida
- ¼ cucharadita de jengibre molido
- ⅛ cucharadita de nuez moscada
- ⅛ cucharadita de clavo molido
- 450 ml de leche (entera o vegetal)
- 70 ml de café fuerte recién hecho
- Nata montada y canela extra para decorar
Manos a la obra…o mejor a la taza:
- Mezcla el puré de calabaza con el azúcar y las especias.
- Añade la leche y calienta removiendo con varillas.
- Incorpora el café y mezcla bien.
- Cuela la bebida y sirve en dos tazas.
- Decora con nata montada y ponle una pizca de canela.
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