Chiltomate, la mejor salsa de México

Creado:
Autor:
Credito
Maria Carrasco Lloria
Categoría
chiltomate salsa mexicana

México y su salsa son una unión gastronómica inseparable y de las más apreciadas por todo el mundo. Por eso es que Taste Atlas, una de las guías culinarias más importantes a nivel internacional, ha hecho un ranking de las mejores salsas mexicanas y a la cabeza se encuentra el Chiltomate.

El chiltomate es una salsa yucateca con todo el sabor mexicano hecha a base de chiles habaneros, cilantro, tomates y cebollas asados y picados en mortero. Este mejunje picante y ahumada se sirve con las muy mexicanas enchiladas y los huevos motuleños por ejemplo, pero puede acompañar a cualquier plato si quieres transportarte a México en apenas un bocado.

A esta salsa de tomate le siguen el chipotle quesado, la salsa macha de Veracruz, el X’nipek yucateco y la salsa ranchera de puebla. Sorprendente es pero el pico de gallo se va hasta el sexto puesto de la lista y el guacamole no se encuentra hasta el número once.

Cierto es que realizar esta salsa con el sabor mexicano original es complicado atendiendo a que los productos son autóctonos de la península de Yucatán, pero en tiendas especializadas tal vez puedas encontrar los ingredientes originales o los más parecidos posibles. No obstante, una vez los tengas, no hay nada tan fácil como elaborar la receta original de un delicioso chiltomate.

Ingredientes: 

  • 5 jitomates

  •  1 diente de ajo

  • 1 chile habanero

  • El jugo de una naranja

  • Media cucharadita sal

  • 3 cucharadas de cilantro

  • Un cuarto de cebolla picada

Elaboración:

Asa los tomates, la cebolla, el ajo y el chile hasta que notes que la piel del tomate se ennegrece y su pulpa se ablanda. En horno suele tardar unos 20 minutos, aunque si lo haces en sartén habrás de estar más atento e ir girándolo para que no se pegue la piel.

Tritura todos los ingredientes junto a la sal, el cilantro y el jugo de naranja en una licuadora o en un moljacete tradicional hasta conseguir una amalgama espesa.

Tanto la consistencia como el condimentado queda al gusto.

Credito
Maria Carrasco Lloria