Madrid y Canarias lograron este 21 de diciembre una hazaña dulce que ya forma parte de la historia gastronómica internacional. La iniciativa impulsada por ACYRE Madrid y ACYRE Canarias logró inscribir en el Guinness World Records el turrón más grande del mundo, una pieza que alcanzó los 1.115,15 metros de longitud, elaborada entre la capital española y el municipio tinerfeño de Santiago del Teide.
La acción comenzó el pasado 7 de noviembre, coincidiendo con el Día Mundial del Turrón, cuando la Real Casa de Correos, en plena Puerta del Sol de Madrid, acogió la primera parte de la elaboración del turrón más grande del mundo, una barra que alcanzó nada menos que 60 metros de longitud.
ACYRE Madrid y ACYRE Canarias, unidos por el turrón
La acción partió de ACYRE Madrid, bajo la dirección de la chef Pepa Muñoz, embajadora del sello M Producto Certificado 2024, con el respaldo institucional de la Comunidad de Madrid. El consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, Carlos Novillo, destacó entonces el valor de la iniciativa como homenaje al sector dulce y a la calidad de los productos de proximidad, tanto madrileños como canarios.
El relevo definitivo en Santiago del Teide, firmó el récord mundial con una sola pieza continua, sin cortes ni añadidos posteriores, cumpliendo estrictamente el protocolo sanitario y técnico exigido por Guinness World Records.
La jueza oficial de Guinness, Anouk de Timary, supervisó personalmente todo el proceso y no dio validez a la marca hasta que el último tramo fue medido y verificado, confirmando una longitud final de 1.115,15 metros.
El turrón se elaboró con ingredientes de la despensa canaria, poniendo en valor el producto local: almendra, miel, gofio de millo y plátano, y, por supuesto, azúcar. La coordinación técnica recayó en el chef Pablo Pastor, al frente de un amplio equipo de cocineros, productores locales y personal especializado.
Las cifras del récord fueron tan espectaculares como la logística necesaria para hacerlo posible: más de tres toneladas de ingredientes, turnos bien organizados y una ejecución milimétrica. Mientras transcurría el esfuerzo, recibían el ánimo de vecinos y visitantes
Una vez certificado el récord, el turrón fue repartido entre 20 entidades sociales del municipio, que trabajan con familias en situación de vulnerabilidad. El alcalde, Emilio Navarro, subrayó el carácter solidario del proyecto:
“La idea es que en estas fiestas ningún hogar de Tenerife se quede sin probar un dulce navideño hecho con producto local”.
Más allá del hito Guinness, la acción ha servido para reivindicar el turrón como símbolo de la Navidad española.
