Los Premios Planes Gourmet se celebraron este jueves, reconociendo lo mejor de la cultura gastronómica española.
Por primera vez la feria literaria más importante del mundo en lengua española, la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, tendrá como embajadora de su Festival Gastronómico a la chef valenciana Begoña Rodrigo, en representación de España, país de honor de la cita.
Desde la guía resaltan que entre los premiados “son muchos los cocineros y cocineras que han decidido volver al barrio, alejándose del centro de las ciudades. Las salas siguen teniendo nombre de mujer, pues son ellas las que capitanean estos espacios donde conquistan a los comensales con empatía y profesionalidad. Cocina de pucheros, arroces, guisos y brasas se dan de la mano con las más vanguardistas y esas que manejan técnicas y productos de distintos rincones del mundo”.
Según la OMS “el apoyo a la salud mental debe ser una prioridad global”, algo que define como: “Un estado de bienestar en el que cada individuo desarrolla su potencial, puede afrontar las tensiones de la vida, es capaz de trabajar de forma productiva y fructífera, y puede aportar algo a su comunidad.”
Con invitados de honor como Jesús Sánchez, recientemente galardonado Premio Nacional de Gastronomía como Mejor Jefe de Cocina y máximo exponente de la alta cocina cántabra, Marta Barca, directora general de Turismo del Gobierno de Cantabria y Gema Igual, alcaldesa de Santander, la comunidad presentaba en Madrid la IV edición de Santander Foodie, el evento para los amantes de la comida creado y dirigido por el chef tres Estrellas Michelín.
Una de las grandes paradojas de la cocina es cómo, siendo un territorio históricamente regido por mujeres, no han sido ellas, sino los hombres, los que se han alzado con lauros y ovaciones. Encargadas tradicionalmente de los fogones domésticos, su trabajo en los grandes restaurantes se veía reducido, hasta no hace mucho tiempo, a tareas de segundo nivel. Sin embargo, pese a que aún son una abrumadora minoría, muchas han demostrado que la gastronomía tiene nombre femenino, y van dejando su estela en el olimpo gastronómico español.