En una semana en la que las tradiciones no faltan, las recetas tampoco. El 1 de noviembre, en España, se celebra el Día de Todos los Santos. Entre sus muchas acepciones, es un día para honrar a la familia en muchas formas y una de las más tradicionales es con la comida.
Cuando restan horas para celebrar una de las fiestas americanas con más impacto mundial, no solo las calles se impregnan del espíritu misterioso de Halloween, sino también las cocinas. Pero, aunque las posibilidades sean tan infinitas como la creatividad culinaria, hay un clásico que nunca falla en la víspera del Día de todos los santos: la tarta de calabaza.
Blanco Hueso es un cóctel cremoso y aterciopelado elaborado con la ginebra mediterránea Gin Mare, ideal para la sobremesa y diseñado para acompañar los buñuelos de viento y los huesos de santo, tan típicos de este día.










