
Para cualquier novato de los fogones, incluso para quienes año tras año asumen el acto de dar de comer en casa, la llegada de la Navidad asusta, porque más allá de las luces, las fiestas entrañan el reto de crear menús con sabor y mimo que, a menudo requiere largas horas. Así que si al menos por un día especial se puede dejarle la tarea a alguien más, no se hable más.
Pero, ¿cómo hacerlo sin que sea a la ligera? ¿qué soluciones de calidad y accesibles existen para degustar un menú a la altura de las fechas? Desde asados hasta mariscadas con los sabores de siempre, la industria alimentaria ha reinventado la Navidad con ofertas para disfrutar en familia sin presiones.
Funcionan como cualquier otro servicio de venta de producto a domicilio, incluyendo elaboraciones rápidas para finalizar en casa con un toque de horno. Es el caso de la empresa de congelados La Sirena, que cuenta ya con más de un centenar de referencias ideadas para las fiestas.
Alta cocina desde el hogar
Aunque existen ofertas más al estilo casero, cada vez hay mayor tendencia a catálogos de estrella Michelin, a partir de una selección doméstica y técnica profesional. Así, aparecen platos diseñados en colaboración con chefs de prestigio como las setas silvestres Laumont asociadas a Martín Berasategui o del surtido de croquetas firmadas por cocineros como Nandu Jubany o Senén González.
Antes de empezar con el plato fuerte, hablemos de aperitivos: mini hojaldres, croissants salados, flores de pescado, mini hot dogs o saquitos rellenos. Se trata de formatos diseñados para compartir el “picar variado”.
Pero si hay un producto que concentra expectativas durante las fiestas, es el marisco. Nada mejor que un buen bogavante o atún rojo, salmón, quisquilla mediterránea o langostino tigre para servir o terminar en horno. Lo mismo en piezas crudas que en versiones cocidas, es posible adquirirlas para dar riendas al sabor del mar sobre la mesa navideña.
No obstante, para quienes prefieren los clásicos asados y largos guisos, la opción sencilla facilita versiones ya listas para calentar como el solomillo Wellington, jarretes, cochinillo o carrilladas estofadas. A estos se suman los imprescindibles navideños como el magret de pato o el foie en distintas presentaciones, clásicos que rara vez faltan en las mesas festivas. Para redondear cualquier plato: gratinados, patatas rellenas, alcachofas confitadas o setas salteadas.
Y como, no hay diciembre sin recetas que evocan infancia y hogar. Los canelones tampoco pueden faltar, con nuevas variantes que van desde el foie y la trufa, hasta el rabo de vacuno, el marisco o las alternativas vegetarianas. No se quedan atrás las croquetas, que amplían su repertorio hacia sabores más creativos: txuleta, rabo, bogavante, setas, espinacas con piñones.
Mientras, si se buscan alternativas vegetarianas o veganas, Heura, en conjunto con la Sirena, diseña un catálogo de patés vegetales, canelones con tomate y orégano, albóndigas vegetales e incluso una sopa navideña vegana inspirada en la tradicional escudella.
El punto dulce para cerrar la cena: canapés dulces, mini cheesecakes, macaron o mini roscones son algunas opciones que basta con sacar del envoltorio, o bien unos lingotes premium de chocolate o avellana…Solo queda empezar la sobremesa.








