
¿Cócteles con vino?¿Un mojito con Fino? ¿Un Negroni con Palo Cortado? Lo que antes sonaba a herejía vinícola hoy es tendencia en las barras más innovadoras. La coctelería moderna está viviendo una auténtica revolución líquida en la que los vinos —especialmente los generosos como el Fino, el Amontillado, el Oloroso o el Cream— están de moda y ahora también se toman en formato cóctel sustituyendo a los destilados clásicos.
¿La clave? Tragos más ligeros, más versátiles, con menos alcohol y una profundidad aromática única. Y, sobre todo, una nueva forma de acercarse al vino, especialmente pensada para quienes lo descubrimos más allá de la copa tradicional.
Sherry Cocktails: vinos generosos que conquistan a todos
Desde el sur de España, los llamados Sherry Cocktails están liderando esta nueva era. Cócteles elaborados con vinos de la D.O. Jerez, la D.O. Manzanilla de Sanlúcar y la D.O. Montilla-Moriles que exploran nuevas formas de consumo: frescas, veraniegas, elegantes y perfectas para el aperitivo, la sobremesa o una noche con amigos.
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Los perfiles aromáticos de estos vinos —secos, salinos, dulces o con notas de frutos secos— los convierten en ingredientes ideales para jugar en la barra. Y lo mejor: funcionan igual de bien en coctelerías de autor que en casa.
Famoso por su frescura, sencillez y sabor inconfundible, el Rebujito es un símbolo del sur de España. Nació en ferias y fiestas populares, pero hoy se sirve en terrazas cosmopolitas de Madrid, Nueva York o Tokio. ¿Su secreto? Esa mezcla entre lo salino del Fino o la Manzanilla y lo chispeante del refresco de lima-limón.
No es casualidad que guste tanto a locales como a turistas: es refrescante, sociable, fácil de beber y absolutamente adictivo.

Cómo preparar Rebujito Ice
- 50 ml de Fino o Manzanilla
- 1 botellín de refresco de lima-limón
- 2 hojas de hierbabuena
- 1 rodaja de lima
- Hielo picado
- (Opcional: 10 ml de tequila para darle un toque vibrante)
Elaboración: En un vaso alto, mezcla el vino bien frío con el refresco. Añade hielo picado en abundancia y, si lo deseas, un poco de tequila. Remueve, decora con hierbabuena y una rodaja de lima. Puro sur en cada sorbo.
Palo Cortado, Cream y Cava: el cóctel se vuelve gourmet
El universo del vino no acaba en el Fino. También hay lugar para el Palo Cortado, que brilla en un Palo Negro utilizando un Palo Cortado Apóstoles de Gonzalez Byass, con carácter seco y profundo; o para el Cream Sherry, utilizando un Cream Piñero, que triunfa en un Cream Sunset, servido muy frío con hielo y una rodaja de naranja.
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Y fuera del Jerez, los vinos espumosos como el Cava se integran cada vez más en cócteles como el Bellini Mediterráneo (con puré de higo) o el Spritz Ibérico, donde un tinto joven aporta frescura inesperada.
¿Por qué esta tendencia conecta con los jóvenes?
Los nuevos consumidores ya no quieren beber como antes. Buscan experiencias diferentes, sabores nuevos, menos alcohol y más autenticidad. Y los cócteles con vino lo tienen todo: identidad de origen, creatividad sin límite y una estética visual que conquista Instagram (sí, también importa).
Además, permiten redescubrir el vino sin protocolos ni etiquetas, desde la coctelera y con hielo si hace falta. Porque si algo está claro, es que beber vino hoy ya no es lo que era. Y eso, sinceramente, nos encanta.
Imagina un mojito, pero con más carácter. El Sherry Mojito sustituye parte del ron por Fino o Amontillado, aportando toques herbales y salinos que transforman el clásico cubano en una delicia más sofisticada y refrescante.
Sherry Mojito con fino

- 3 rodajas de limón
- 15 ml de sirope de azúcar (o 2 cdtas. de azúcar moreno)
- 30 ml de ron blanco
- 40 ml de Fino o Amontillado
- 6-8 hojas de menta o hierbabuena
- Hielo picado
Elaboración: Exprime el limón en el vaso, añade azúcar, ron y vino. Machaca suavemente las hojas de hierbabuena y mézclalas. Llena con hielo picado, remueve y disfruta de un trago con acento andaluz.
¿Dónde probarlos y cómo aprender?
Muchos bares ya apuestan por cartas líquidas con vinos en cócteles. Pero si quieres probar en casa, la plataforma oficial Sherry Cocktails ofrece recetas, vídeos y consejos para empezar a mezclar sin miedo.
Y si lo tuyo es explorar, hay talleres, catas y experiencias que muestran el lado más creativo del vino. Porque sí: el vino también sabe jugar.