
Cuando hablamos de alta cocina en China, uno de los nombres que siempre aparece en primer plano es la gastronomía Lu, originaria de la provincia de Shandong. Considerada una de las "Ocho Grandes Tradiciones Culinarias" del país, su legado va más allá de la mesa: es historia, cultura y técnica perfeccionada durante siglos.
Una cocina con raíces imperiales
La gastronomía Lu fue la cocina oficial de las dinastías Ming y Qing, servida en los banquetes imperiales de la Ciudad Prohibida. Esta distinción no fue casual: sus platos combinan el arte de la presentación, la delicadeza en el corte de los ingredientes y una armonía perfecta entre sabor, color y textura.
A diferencia de otras cocinas regionales chinas más picantes o dulces, la cocina Lu destaca por su equilibrio. Sus sabores son intensos pero refinados, dominando el umami natural de ingredientes marinos, caldos y reducciones.
Principales características de la cocina Lu
- Dominio del fuego: técnicas como el salteado rápido (chao), el estofado a fuego lento (shao) o el horneado en ceniza revelan el control absoluto sobre la temperatura.
- Salsas claras y caldos complejos: los fondos y sopas son esenciales, con ingredientes como huesos de cerdo, mariscos y setas.
- Ingredientes de calidad: mariscos, algas, productos del campo, tofu y carnes nobles.
Platos emblemáticos que definen una tradición
Entre los platos más representativos se encuentran:
- Carpa agridulce del Río Amarillo: emblema de la cocina de Shandong, preparado con una fritura rápida y cubierto con una salsa vibrante.
- Sopa clara de aleta de tiburón: servida en banquetes imperiales, símbolo de lujo y técnica refinada.
- Langosta en salsa de jengibre y cebolleta: muestra de cómo la cocina Lu realza los sabores naturales sin enmascararlos.
- Cerdo Dongpo (compartido con otras regiones): cocido a fuego lento hasta alcanzar una textura melosa.
Influencia y proyección internacional
Si bien la cocina Lu no ha sido tan internacionalizada como la cantonesa o la sichuanesa, su influencia es profunda dentro de la China continental. Muchos chefs de prestigio la consideran la base académica de la cocina clásica china, y en las escuelas culinarias del país es parte obligatoria del programa.
En los últimos años, algunos restaurantes de alta cocina en Pekín, Shanghái y Nueva York han revalorizado sus técnicas, incorporándolas a menús degustación contemporáneos.
La gastronomía Lu como patrimonio vivo
En un momento en que la cocina china busca abrirse al mundo con más fuerza, la gastronomía Lu se reivindica como un pilar esencial. Es la memoria de un país en cada caldo, el refinamiento en cada bocado.
Su respeto por el producto y la técnica la convierten en una de las más ricas expresiones del patrimonio culinario universal.