
El pasado 11 de junio, el restaurante Bevir reabrió sus puertas en el prestigioso Lopesan Costa Meloneras Resort & Spa, marcando un esperado regreso a la alta cocina en el sur de Gran Canaria. Bevir vuelve a la escena culinaria canaria bajo el nombre de Bevir by Lopesan, con una propuesta creativa que explora el diálogo entre el mar, la tierra y la memoria.
El chef José Luis Espino, fundador del proyecto original en Las Palmas de Gran Canaria, lidera esta nueva etapa. Junto al chef, destaca también el fichaje del sumiller Diego Tornel, con experiencia en los restaurantes más exigentes del país.
Fortunata y Jacinta: dos menús, un mismo espíritu canario
La propuesta de Bevir se despliega en dos menús degustación de nombres literarios: Fortunata (11 pases) y Jacinta (14 pases), un homenaje a la obra del canario Benito Pérez Galdós. En ambos casos, la experiencia gira en torno a productos de temporada, con especial atención a la materia prima de proximidad, procedente de la Finca de Veneguera y otros productores locales.
Desde platos que parten de la remolacha cocinada a baja temperatura con beurre blanc y eneldo, hasta el atún rojo confitado con toffee marino, cada creación está diseñada para evocar el paisaje, el clima y la identidad del archipiélago. La técnica de cocina, lejos de imponerse, respeta la esencia del producto y subraya sus cualidades naturales.
Una de las señas de identidad de Bevir es su afán por no desperdiciar nada. “Nos planteamos qué parte del pescado, la verdura o la fruta puede reutilizarse de manera creativa, sin caer en la estética por la estética”, ha explicado Espino en entrevistas previas.
La sala como parte del relato: vinos, narrativa y hospitalidad
Uno de los puntos fuertes de la experiencia Bevir es el trabajo de Diego Tornel, sumiller que plantea un maridaje versátil y sorprendente, con referencias que van desde vinos canarios hasta etiquetas internacionales poco convencionales.
El equipo de sala no se limita a servir platos: narra, acompaña y convierte la comida en un storytelling sensorial. La vajilla, la disposición de los elementos y la interacción con el comensal se integran como parte del viaje.
El comedor, con capacidad para 20 personas, está diseñado para el confort sin ostentación. La arquitectura interior dialoga con el entorno natural del hotel, entre palmeras, jardines y la cercanía del mar.
Bevir y el mapa Michelin de Gran Canaria
Con su reapertura en Maspalomas, Bevir se suma a la lista de posibles restaurantes con estrella Michelin para este año o el próximo, ya que, con el cambio de ubicación pierde estos galardones, en la isla, donde también figuran Aquarela, Los Guayres, Poemas y Tabaiba. Sin embargo, su enfoque es singular: más que reinterpretar recetas tradicionales, Bevir construye una cocina de autor, pero profundamente arraigada en el territorio.
La apuesta de Lopesan Hotel Group por integrar un restaurante de alta cocina dentro de su oferta hotelera también marca un nuevo rumbo para el turismo gastronómico en el archipiélago, reforzando la idea de que Gran Canaria no solo es un destino de sol y playa, sino también de experiencias gourmet.
Gastronomía con propósito: sostenibilidad y legado
Además de su ambición culinaria, Bevir se presenta como un proyecto con valores. La sostenibilidad no es una etiqueta, sino una forma de trabajo: desde el cultivo ecológico de sus ingredientes hasta la gestión energética del local. Cada detalle, desde los fermentados hasta los caldos, está pensado para reducir la huella ambiental y valorar el entorno canario.
La propuesta de Bevir se alinea con una generación de cocineros que entienden la alta cocina como plataforma de cultura, economía local y responsabilidad.
En palabras del propio chef Espino: “Queremos que quien nos visite sienta el sabor de la isla en el plato, pero también que entienda de dónde viene y por qué sabe así”.