
Tras colgar las botas, el exfutbolista Nacho Garro, de 44 años, ha encontrado un nuevo terreno de juego: los vestuarios de los estadios. Lejos de las alineaciones y los marcadores, pero muy cerca de los protagonistas, Garro es hoy fundador y director de La Mendozina, un servicio de catering deportivo que ofrece comidas tras los partidos a equipos profesionales en Madrid.
La iniciativa, nacida de su propia experiencia como jugador, se ha convertido en una aliada habitual para clubes de fútbol, baloncesto y otras disciplinas que visitan la capital.
Los inicios: de pizzas en Bilbao a un referente nacional
Natural de Vitoria y formado en la cantera del Athletic Club, Garro inició esta aventura casi por casualidad. Uno de sus primeros pedidos llegó del propio Athletic: Óscar de Marcos, recién ascendido al primer equipo, le encargó unas pizzas tras un encuentro.
Después vinieron otros nombres como Markel Bergara, de la Real Sociedad, y el guardameta Dani Aranzubía desde el Atlético de Madrid.
Aquellos tres encargos fueron la semilla de La Mendozina, que hoy crece con seriedad, calidad y conocimiento del deporte desde dentro.
Un servicio que llega a casi todos los clubes
Once temporadas después de su fundación, La Mendozina se ha consolidado como el catering deportivo de referencia en Madrid. Atendiendo a más del 90% de los equipos de LaLiga, Segunda, Primera Federación, ACB, fútbol femenino y otras competiciones, Garro y su equipo abastecen a clubes de baloncesto, fútbol sala, balonmano y hockey hierba.
La logística incluye reparto en estadios, aeropuertos, estaciones y hasta áreas de servicio, con una disponibilidad casi 24/7. En temporada alta, atienden a más de 13.000 deportistas y hasta 10 equipos por semana.
Pasión y compromiso personal
Nacido en abril de 1981, Garro jugó en clubes como Athletic Club, UD Las Palmas, Deportivo Alavés, SD Éibar, Burgos, Real Murcia y Amurrio, cerrando su carrera en 2012 en el CD Mirandés.
Hoy, supervisa personalmente el 90% de las entregas para asegurar la calidad y mantener la cercanía, una ética que heredó de su padre, aún activo laboralmente a sus 80 años.
Menús pensados para el deportista
La carta de La Mendozina ofrece hamburguesas, pizzas, ensaladas frescas, pasta, arroces, wraps, sushi y poké bowls. Los nutricionistas de los clubes seleccionan menús equilibrados, mientras que otros permiten a sus jugadores elegir libremente su plato favorito.
En la actualidad, han crecido las demandas de menús halal, opciones sin gluten, veganas o altas en proteínas, asegurando que todos los deportistas reciban una comida adaptada a sus necesidades.
Con La Mendozina, ha convertido la gastronomía y la nutrición en su nueva forma de seguir alimentando al deporte profesional.
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