
México continúa sorprendiéndonos con su riqueza cultural y gastronómica. Un ejemplo vivo de ello es el Valle de Parras, en el estado de Coahuila, hogar del viñedo más antiguo del continente americano: Casa Madero, fundada en 1597. Reconocido en la XIV edición de los Premios Excelencias, este viñedo ha sido testigo de más de cuatro siglos de historia vitivinícola.
El origen de una tradición que se remonta al siglo XVI
Las raíces de este viñedo se hunden en la época colonial. Fue en 1594 cuando los jesuitas Jerónimo Ramírez, Francisco de Arista y Juan Agustín de Espinosa fundaron la Misión de Santa María de las Parras. Un año más tarde, Don Lorenzo García solicitó al rey Felipe II autorización para plantar vides en estas fértiles tierras. Así nació la Hacienda San Lorenzo, hoy conocida como Casa Madero, considerada pionera del vino en América.
Condiciones naturales únicas en el corazón de Coahuila
La ubicación de Parras de la Fuente no es casual: sus manantiales, clima seco y su altitud (a más de 1500 m.s.n.m.) crean el microclima ideal para el cultivo de la vid. Este oasis natural propicia cosechas excepcionales tanto para vinos tintos como blancos.
Las principales variedades cultivadas incluyen Cabernet Sauvignon, Merlot, Syrah y Tempranillo para tintos, y Chardonnay, Chenin Blanc, Semillón y Colombard para blancos.
Un patrimonio vivo para los amantes del vino
Recorrer las instalaciones de Casa Madero es como viajar en el tiempo. El visitante puede admirar prensas de madera del siglo XVII, barricas antiguas, cavas subterráneas y salas de degustación impregnadas del aroma del vino. La experiencia combina historia, tradición y la más alta calidad enológica.
La fiesta de la vendimia, celebrada cada agosto, reúne a locales y visitantes en un ritual ancestral: trajes típicos, música, hogueras y el pisado de uvas en comunidad.
Innovación y expansión: vino mexicano con proyección internacional
Además de Casa Madero, Coahuila alberga otros proyectos destacados como Rivero González y el viñedo de Don Leo, este último situado a 2.000 metros sobre el nivel del mar y productor del único vino kosher certificado de México.
En eventos internacionales como Vinexposium (Francia), el vino mexicano ha dejado huella por su calidad, taninos elegantes y versatilidad gastronómica.
Un hito en la historia del vino en América
La historia vitivinícola de México tiene raíces profundas. En 1524, Hernán Cortés decretó que cada español con encomienda debía plantar mil vides al año, sentando las bases de la viticultura en el Nuevo Mundo.
Hoy, esa semilla ha germinado en lugares como Parras de la Fuente, cuya Casa Madero representa no solo el viñedo más antiguo de América, sino también un referente de calidad, resiliencia y pasión por el vino.