
El World Food Photography Awards, el certamen de fotografía gastronómica más importante del mundo, en el que se presentan más de diez mil imágenes procedentes de unos 70 países, ha llegado al Palacio Montehermoso de Vitoria. Hasta el 16 de noviembre, el público podrá visitar una exposición con las 22 mejores fotografías del concurso. Esta se exhibirá junto a la conocida World Press Photo.
Un homenaje a la dimensión artística de la gastronomía
Creado hace 15 años en el Reino Unido, el World Food Photography Awards nació con el propósito de poner en valor otra de las dimensiones de la disciplina gastronómica, revalorizándola como un arte visual que involucra mucho más que el simple acto de comer. Porque la comida también “entra por los ojos” y supera la mesa, el mantel y el fogón. Esa realidad está hoy plasmada en las paredes vascas.
Las fotografías “cuentan historias de cualquier parte del mundo y capturan momentos de la felicidad que da una comida, pero también reflejan el drama de quienes carecen de ella”, explica Paco Valderrama, comisario de la exposición.
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La otra cara del arte culinario
En el palacio, los visitantes podrán contemplar la imagen ganadora de la última edición, que muestra a cinco ancianas comiendo rollitos de primavera en Sichuan, entre conversaciones animadas y risas casi ancestrales. La escena ilustra una costumbre china que canaliza la felicidad y trasciende fronteras: comer es sinónimo de alegría y conexión.
Otras obras destacadas, además de reivindicar el arte de comer, denuncian prácticas o costumbres culinarias consideradas controvertidas desde una óptica occidental. Entre ellas, la fotografía del británico Lawrence Worcester, que denuncia el consumo de carne de perro en Vietnam, poniendo de relieve el choque cultural entre tradición y ética contemporánea.