
Uniban, una de las principales exportadoras de banano del mundo, vuelve a Madrid con una presencia cada vez más sólida y una estrategia clara. En una entrevista en exclusiva para Excelencias Gourmet con Manuel Laborde, presidente de Uniban, destacó el deseo de la empresa en fortalecer sus lazos comerciales en Europa y seguir posicionando el banano colombiano como un producto de excelencia global.
Con más de seis décadas de trayectoria, Uniban ha construido un modelo de negocio que combina productividad, sostenibilidad y compromiso social. Desde su sede en Urabá (Colombia), la compañía impulsa el desarrollo de miles de pequeños agricultores y comunidades rurales, consolidando una cadena de valor que hoy alcanza los principales mercados del mundo.
Su participación en ferias internacionales, como Fruit Attraction, ha crecido año tras año, reflejando su expansión global y el fortalecimiento de su red de trabajo.
Atendiendo a que España cuenta con una producción atemporal de plátano en Canarias, ¿cómo funciona Uniban en el mercado español con la exportación de banano colombiano?
En España, el plátano canario —lo que nosotros llamamos banano— es muy importante. Nosotros participamos del otro 40 o 50 % del mercado correspondiente al banano importado. En ese espacio operamos mediante socios españoles, tanto en Mercamadrid como en Mercabarna (Barcelona), donde maduramos el producto y también proveemos las marcas de nuestros clientes.
El segmento del plátano macho (o plantain, en inglés) está creciendo de forma notable, impulsado por la gran población hispana —casi un millón de colombianos—, pero también por inmigrantes del Caribe y venezolanos. Para todos ellos, el plátano forma parte esencial de su cocina y su cultura. Además, cada vez vemos más presencia del plátano en los menús de restaurantes españoles, ya sea en ceviches o en otras preparaciones.
También observamos un aumento en el consumo del plátano congelado, segmento que pronto lanzaremos, junto con productos derivados de yuca.
Hablando de las últimas marcas que lanzáis, como Turbana, ¿cómo ha sido la acogida en España de los productos procesados de plátano que comercializáis a través de Uniban?
Ahora estamos lanzando un producto nuevo: los Scoops, cucharitas hechas de plátano, ideales para hacer dipping con guacamole y otros acompañamientos.
La línea Turbana es muy especial. Aunque somos de los mayores exportadores de plátano macho de Colombia, no poseemos una sola hectárea de cultivo propio, sino que trabajamos con 2.440 pequeños agricultores: indígenas, afrocolombianos, reinsertados de la guerrilla, entre otros. En lugar de competir con ellos sembrando directamente, los apoyamos y financiamos. De esa colaboración surge el plátano fresco que se comercializa con la marca Turbana, un producto que representa un verdadero motivo de orgullo al ver cómo estas comunidades llevan su trabajo al mercado mundial.
Participamos también en el sector de la restauración Nueva York, donde estas marcas tienen mucho éxito y es una preferencia que sigue creciendo cada año.
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¿Cuáles son los mercados más relevantes para Uniban a nivel global?
El principal mercado del plátano macho, con diferencia, es Estados Unidos. En Europa, el primer mercado es Francia, seguido por España, Reino Unido e Italia. Este consumo también está impulsado por comunidades africanas, del sur de Asia (principalmente, India y Pakistán) y del Caribe, especialmente franceses de Martinica o jamaiquinos residentes en Francia e Inglaterra.
Además, se observa un crossover hacia el público general: cada vez más restaurantes incluyen entradas o guarniciones con plátano en rodajas o tiras, y el producto gana presencia en las cartas.
Sobre el componente social de Uniban, ¿podrías explicar cómo se ha desarrollado y cómo se inserta actualmente en la sociedad colombiana?
Cumpliremos 60 años en enero del próximo año. Operamos en una región cercana al Tapón del Darién, donde antes de la llegada de la industria no existía infraestructura alguna: ni carreteras, ni salud, ni educación, ni vivienda. A través de Uniban, que es la matriz de todas las bananeras de la zona, se ha ido “construyendo nación”. Desde Uniban hemos trabajado en vías, servicios básicos e infraestructura.
Nos hemos convertido en una de las cinco exportadoras de banano más grandes del mundo y ahora trabajaremos con nuestro puerto propio. Estamos construyendo el futuro Puerto de Antioquía o Puerto de Urabá con inversión privada valorada en 800 millones de dólares, cuya inauguración está prevista para diciembre. Este proyecto transformará por completo las cadenas de suministro del país.
A través de nuestra Fundación Uniban, financiada con aportes directos por cada caja de banano —que incluye un porcentaje destinado al reciclaje y venta de cartón—, generamos un fondo de unos 5 millones de dólares anuales. Con esos recursos apoyamos la compra de vivienda para nuestros empleados. Es algo de lo que estamos profundamente orgullosos.

¿Cuántos puestos de trabajo genera Uniban actualmente en la región de Urabá?
La regla de tres es fácil. Aproximadamente, hay una persona empleada por cada hectárea cultivada, y contamos con unas 18.000 hectáreas en producción entre Uniban y nuestros asociados. Además, empleamos entre 2.000 y 3.000 personas en logística y transporte fluvial, ya que trasladamos la fruta por el río en barcazas hasta el mar.
Muchas de las labores operativas se gestionan mediante cooperativas locales, como las encargadas del pelado de snacks —integradas por madres cabeza de hogar—, el transporte terrestre o la fabricación de pallets de madera. En total, estimamos que unas 100.000 personas forman parte del clúster laboral de la región.
Cosechamos diariamente en 150 fincas y trabajamos con 2.440 productores de plátano, lo que implica una red humana que abarca desde el empaque hasta la fumigación. Por eso, cuando observas de cerca, entiendes cómo regiones como Turbo, Apartadó, Carepa, en Urabá, han crecido y prosperado gracias a esta industria.
¿Cuáles son los valores fundamentales de Uniban?
Trabajo, disciplina, resiliencia y respeto: respeto por nuestros accionistas, por nuestros empleados y por las comunidades donde operamos. Somos un grupo de exportadores colombianos que se encuentra entre las cinco mayores compañías exportadoras de banano del mundo, compitiendo cada día con multinacionales que llevan más de 120 años en el mercado. Por eso debemos estar at the top of our game todos los días.